miércoles, 29 de septiembre de 2010

Crónica de una marcha

Por
Griselda "Markeza" Pacheco




A la expectativa me encontraba de esta marcha. No por todos los rumores que corrían sobre sus asistentes, ni por haber escuchado las opiniones de los compañeros sobre las supuestas órdenes a los preparatorianos de crear disturbios en ella. La verdad es que me sentía ansiosa de esta marcha porque la presentía como el gran final del "show" mediático que nos hemos aventado desde hace por lo menos 3 meses. Después Almazán me daría la razón, él lo llama "el final de temporada". Pero esas pláticas con Almazán me las quedo para luego. Algo habré de hacer con ellas.

A las 10 estábamos frente a Rectoría esperando la organización del contingente que de ahí saldría. Ya habían llegado los jubilados y retirados desde las 9.30 y habían puesto sus mantas junto al Paraninfo. Se tomaban fotos, platicaban entre ellos. Nadie sabía nada. Ni a que hora comenzaba, ni cómo se iban a acomodar. 30 minutos después ya se veía un movimiento más organizado. En algún momento salió Trinidad Padilla para hablar con la prensa. Pero eso duró poco.
Almazán y yo esperábamos en el edificio -"Yo lo que quiero ver es al Rector y a Aristóteles"- le dije.
Ya eran las 11 y el Rector ni sus luces. La gente ya estaba acomodada y se escuchaban los típicos chiflidos cual función de cine. Después de 15 minutos un "¡ya viene el Rector!" dio el aviso de qué Marco Antonio Cortés Guardado salía por el Paraninfo.
Entre empujones y golpes salía el bajito Rector, tratando de atravesar a la gente y a los medios que en algún momento trataron de entrevistarlo. Si lo lograron, nadie escuchó nada.
Fueron más de treinta los minutos que se tardaron en acomodar a los "altos funcionarios". Entre "Señor Rector póngase aquí. No mejor póngase de este lado" y los intentos de los "organizadores" por armar una valla humana para rodear a Cortés y compañía.
-"Mmta. En Guadalajara no saben armar manifestaciones."- Se reía Almazán.
Por fin, el contingente que salía de Rectoría marchaba a paso regular como a eso de las 12. Al frente iban en fila Marco Antonio Cortés de brazo con Fernando del Paso, luego se les uniría Trinidad Padilla y otros funcionarios.
Ya rato después el mismísimo Raúl Padilla López.

Llegamos a Plaza de la Liberación a las 12:40 más o menos. Yo perdí a Almazán en algún momento y mejor me decidí por escabullirme (literal) entre los periodistas para ver que podía sacar. Ya adelante empezaron los discursos.
Cuando tocó turno a César Barba (Chicho) sacó al frente a Fernando del Paso; todos nos preocupamos. Pero fue en vano aquella angustia pues el Chicho tomó el micrófono por largo rato. Su discurso "El día de hoy, sin necesidad de gastar 15 millones de dólares en un concierto, reunimos a más de noventa mil universitarios". (Después, en rueda de prensa, se le preguntó a Cortés Guardado sobre el presupuesto del gasto utilizado para esta marcha. No hubo respuesta.) "Hoy salimos y volveremos a salir las veces que sea necesario", añadió Barba.
Trinidad exclamaba:
"Queremos que no se escude usted, Señor Gobernador, detrás de una campaña de calumnias contra los universitarios".
Marco Antonio declaraba: "Dirán misa, pero somos una de las instituciones más transparentes y que mejor rinden cuentas en México".
Raúl no habló.
Después de terminados los discursos, convocaron a rueda de prensa en un hotel cercano. La Doctora Maria Elena mucho podría haber criticado de esta rueda. Desorganizada en todos sus sentidos. Bueno ni hablar, lo importante a señalar fueron las declaraciones del Rector Marco Antonio Cortés respecto a la marcha que juzgó de "ordenada y sin complicaciones". "Más de 90 mil universitarios" declaraba al principio, ahora vemos que nadie se pone de acuerdo en cuántos fueron los asistentes a la marcha.
"La marcha está mandando un mensaje muy claro al Gobierno de Jalisco"
y "Lo peor que pudría suceder es que el Gobierno Estatal siguiera haciendo oídos sordos a lo que le esta diciendo la comunidad universitaria. Que hiciera oídos a lo que está diciendo la sociedad de Jalisco".
Bien, la marcha tan anunciada terminó ahí. Quizá la repitan, quizá no. Quizá será como Almazán bien decía, el fin de una temporada del espectáculo este que nos ha tocado presenciar. Esperemos a la que sigue. :)

--A más de 8 horas de que fue el evento, pero nunca está de más leer la crónica de una compañera estratega ¿no? ;)

[Están disponibles, para quienes les interese, los audios recogidos durante la marcha, los discursos y la rueda de prensa.]

La megamarcha de un cabrón




Omar García


La cita

La cita era a las 11 de la noche en el centro universitario de la Costa, en Puerto Vallarta. Había que partir temprano, a la hora pactada… una marcha los esperaba doce horas después. Y ahora que ha pasado ese tiempo ahí están, con la batucada en las piernas y la almohada pintada en la cara, afuera del Proulex , ese negocio de la Universidad que está en Juárez y Enrique Díaz de León y que desde hace 2 años tiene ganancias por 41 millones de pesos sin que un solo peso toque las finanzas universitarias.

Ahí está el problema de Don Adrián, el señor que vende desayunos a unas cuadras de la preparatoria N° 5. “Pues es que si les dieran a la universidad la feria para lo que piden, pues ya no había bronca… pero casi siempre desvían recursos pa los negocios de ése cabrón” Ese cabrón al que se refiere don Adrián es Raúl Padilla, el exrector de la Universidad de Guadalajara y quien se ha definido como promotor cultural en el Estado. Lo reconocen tanto en el congreso del Estado como las mejores plumas que vienen a la FIL. Un hombre que hoy en día es respetado y odiado al mismo tiempo, el Twitter y Facebook replican el dicho. Aunque también se dice que es el hombre que decide las cosas más importantes dentro de la institución que tiene en sus filas a un tercio de millón de personas entre estudiantes, académicos y administrativos. No por nada el gobierno del Estado emitió un boletín diciendo que la megamarcha de hoy es convocada por ese hombre que no figura en el organigrama. Pero es raro… veamos porque.

Siguen siendo las 11 de la mañana, los chavos de prepa Vallarta están a un costado de los manifestantes del Centro Universitario de Ciencias Biológico y Agropecuarias, después la gente de recursos humanos, áreas administrativas, unos hombres trajeados a la usanza wixarika y después personal de vicerectoría. Todos quieren un poco de sombra del edificio de 12 pisos, aquí el sol está dinamitando estrés y esto aún no empieza. Es hora de avanzar y no se ve que Marco Antonio Cortes Guardado camine, siendo sinceros, parece que el hombre levita; y es que ese señor de cara limpia y barbas negras parece que no cabe en sí mismo, su robustez lo denuncia. Llega al lugar y no avanza. Y a un costado se ve el porque.


La foto

Caminando se ve, vestido de blanco y con una botella de agua a la que le han quitado la etiqueta está Marco Antonio Cortés Guardado, rector general. Total de percepciones quincenales $71,020.97. A un costado, de gorra, alto y calvo, Miguel Ángel Navarro Navarro, vicerrector de la Universidad de Guadalajara con un total de percepciones quincenales de $66,841.83. Del otro lado, más calvo, más chaparro, y con más muchachos a su alrededor, José Alfredo Peña Ramos, secretario general de la institución educativa. Total de percepciones quincenales: $61,631.32
Y en la foto hay más: Tonatiuh Bravo Padilla, ex diputado federal, leyenda en la FEG, a quien la esposa de Don Adrián lo tiñe con el apodo de “el más guapo de aquellos años” recibe, en total de percepciones quincenales, $51,546.61. Más allá, de lentes, como siempre, peinado, como siempre, de piel blanca y sonrisa marcada en las mejillas, José Trinidad Padilla López. Total de percepciones en la UdG para el hoy diputado federal: $18,612.57.

Y en el extremo de la foto está él, a quien Don Adrian ha llamado cabrón: Raúl Padilla López, el personaje que desde hace 15 años está comisionado en el Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades a la cátedra Julio Cortázar. Cobra, en total de percepciones quincenales, la cantidad de $18,612.57

Y atrás, en el contingente viene un doctor que da clase en algún centro universitario y que para el caso le llamaremos Martín. Da 6 clases a la semana y además hace investigación, lucha por entrar al sistema nacional de investigadores y tiene 2 hijos estudiando en la prepa. Sus cuatro mil pesos al mes no le alcanzan y marcha para que le vaya mejor y se agreguen ceros a un cheque que estuvo a punto de no llegar porque el gobierno del Estado no había entregado recursos federales. También está Vicente, también por llamarlo de algún modo, quien hace el aseo en la prepa. 2000 pesos al mes.

El contingente sigue, los policías les recomiendan a los locatarios de la avenida Juárez que cierren sus comercios mientras pasa el contingente. En la radio se escucha que diferentes personas de la comisión de Derechos Humanos están presentes para salvaguardar el derecho a manifestarse, pero nadie escucha a Don Luis, quien vende “fayuca” en el andador Colón… si no abren rápido el centro él no podrá comer, con los 80 pesos que gana al día apenas le alcanza.
Y el contigente sigue caminando, mientras otros 4 ejércitos, la marabunta humana que se ha vestido de blanco, ya se han sumado y arriban a la plaza liberación. La guerra de números en la postmarcha dirán que la cantidad de manifestantes oscilan entre 25 mil y 90 mil. Nada raro, nadie vende cosas malas… si el gobierno del Estado hubiera organizado, seguro serían más que los 150 mil que fueron a un concierto en la Minerva, cuando todos saben que no cabe tanta gente en un costado de esa glorieta.

El mítin

Y empieza la perorata. Nada nuevo: 700 millones de pesos que se adeudan desde 2007 a la casa de estudios. Consignas que arremeten contra Emilio González por dar dinero a telenovelas y no a la educación. Una carta mandada de la UNAM en apoyo a la UdG. Y lo de antología para que esta marcha no se parezca a ninguna otra: un maestro de ceremonias que dice orgulloso, con la voz aguardientosa, y la cara sudada “"damos las gracias también a nuestro maestro émerito, un hombre de valores, que nos ha enorgullecido siempre a todos los universitarios... (Se aleja un segundo del micro, mira hacia atrás y dice "pásenme el nombre de el señor)"

Se refería a Fernando del Paso.

Han pasado más de 3 horas desde que los jóvenes de Vallarta descendieron del camión que los trajo desde la costa, y cuando les pregunto si volverían a venir concluyen “pues si nos vuelven a pagar todo, a lo mejor y sí”


Pd.- El cabrón no es tan cabrón como se piensa, a veces parece que es más.
Pd 2.- El gobierno del Estado tiene muchos “pinches papelitos” lo que no quiere es a ese cabrón
Pd 3.- Don Adrián sigue vendiendo lonches y diciendo frases tan sabias como la del desayuno. Lo mejor de todo, vive en mi casa. Gracias papá.

sábado, 25 de septiembre de 2010

La psicosis también amenaza.



Crónica de una amenaza de bomba en la UdG.
Jueves por la mañana, el profesor ha dejado de tomar lista, nos ha dicho que podemos salir, que no hay problema, que no olvidemos enviar nuestra tarea por correo electrónico, que ya ha sido acordado, que podemos salir, corriendo si queremos.

Salir, sí, esa acción de evacuar un sitio… algo que no nos dejarán hacer cuando haya amenaza de bomba. Pero eso será después.

Faltan más de 60 minutos para que de inicio la conferencia que reunirá a unos pocos estudiantes, algunos de Derecho que son acarreados por su presidente de la sociedad de alumnos, algunos profesores y otros maestros de la vida con los que nos ha tocado conversar. Y digo en plural porque esta es una historia de tres, los tres que salimos del salón hace un rato y ahora, apenas las 10:10 de la mañana, como unos ñoños cualquiera, entramos al Paraninfo de la Universidad de Guadalajara. El registro es lo de siempre: pluma sobre el papel, jeroglíficos en la columna de nombre, procedencia, correo electrónico, y definición: estudiante, profesor, prensa u otro.

Al sabernos únicos en el paraninfo, ¿quién llega tan temprano?, somos los primeros en el recinto donde se presentarán los ganadores del premio de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano. Es el olor a insecticida lo que nos espantó las ganas de esperar y decidimos salir, quizá a buscar algo que mitigara la revolución en el estomago a falta de comida, quizá solamente no queríamos estar solos frente a los murales de Orozco, que a cualquiera intimidan. Quizá también solo queríamos que nos consumiera el tiempo en otro lado. Tres mochilas que dejaremos en la tercera fila del lado izquierdo, tres mochilas pesadas que están ocupando los lugares en los que esperamos reposar las nalgas, tres motivos para que al final sean la nota del día siguiente.

Son las once menos cuarto, hemos embutido unos cuernitos tía rosa y un Hershey´s de coockies and cream mientras platicábamos sentados en la banca de la Rambla Cataluña que fue nuestra segunda opción, porque la primera banca estaba sucia. Los tres que compartíamos el manjar saludamos a Juan Carlos Nuñez, nuestro profesor de ética de la comunicación, él también quería conocer cómo se hace un trabajo ganador de un premio de la FNPI. Y en la plática salía a relucir el tema que nos tiene consumidos en la Universidad de Guadalajara: la pelea mediática con el gobernador del Estado por el presupuesto. Y la última noticia es la patraña de que éste último se sentía amenazado de muerte porque en una de las marchas, los estudiantes de la prepa de Tonala le habían regalado unas catrinas de papel mache que los estudiantes habían elaborado en un taller. Fuera de eso, sabíamos que la pelea entre UdeG y Gobierno del Estado ya había pasado de la razón y el argumento a la estupidez de ganar espacio como sea en los medios de comunicación.

Es hora, son las 11 horas y ya no tarda en comenzar. También, en el segundo piso del paraninfo hay una rueda de prensa donde se denunciará que el Gobierno del Estado debió haber entregado un cheque por 177 millones de pesos desde el 20 de septiembre, y que de no hacerlo pronto, la nómina de los empleados de toda la red en el Estado estaba en riesgo. Pero eso fue después, ahorita los tres vamos entrando de nuevo al Paraninfo pero nuestras mochilas son sostenidas con sigilo por dos personas. No las quieren abrir pero se ve que no saben cómo agarrarlas. Como si estuvieran más pesadas de lo normal, ambos las sostienen. Ellos, los mismos de siempre, esas personas que he reconocido en diferentes eventos como personal de seguridad tanto del rector como del líder de la institución.

- Oiga, esas son de nosotros. Y apuntábamos con el dedo nuestras pertenencias, una mochila negra, una azul y una que parece más una bolsa de coctel.
- Y por qué las dejaron solas. Y luego, qué no saben…
- No pues salimos a comprar algo, faltaba mucho tiempo, no pasa nada ¿o sí?
- Pues la siguiente deben dejar a alguien cuidándolas; decía el hombre en un tono enojado
- ¿Nos las puede devolver?; -y trataba de alcanzarlas con la mano-.
- La siguiente que lo vuelvan a hacer ya no van a entrar, ¿entendido?
Las tomamos y nos fuimos a sentar a esperar.

Cuarenta minutos después, y mientras Leila Guerriero empezaba a diseccionar el trabajo que la hizo ganadora del premio en la categoría de texto, Armando Zacarias, el rector de CULAGOS y quien hizo la presentación, la interrumpía, decía que protección civil estaba aguardando afuera, y un par de perros ladraban, eran Max y Tony, del escuadrón canino del cuerpo de bomberos de Guadalajara; olían la psicosis.

Lo peor de todo: había amenaza de bomba pero a nosotros no nos dejaban salir del pasillo que comunica el recinto del paraninfo y la calle. Y ahí se nos vino a la mente “¿habrán pensado que nuestras mochilas eran bombas?” No lo sabemos… sólo que hace 40 minutos las mochilas estaban solas, en el paraninfo, y fue el mismo tiempo en que el 066 salió de algún teléfono de la rectoría para pedir que los bomberos hicieran una revisión.
Psicosis o no, la conferencia se interrumpió, al igual que la rueda de prensa, al igual que las buenas conciencias.

Pd 1.- El próximo miércoles está programada una nueva marcha, la mega marcha que espera reunir 50 mil personas.
Pd 2.- Emilio sigue pensando que lo quieren matar por mandarle un par de catrinas a su casa, por eso han reforzado su seguridad.
Pd 3.- Un amigo periodista viene de la ciudad de México, sabe que se han calentado tanto las cosas que la estupidez puede ir de los dichos a los hechos.

Silencio o Muerte, opinión de Aristegui

Carmen Aristegui F.
REFORMA
25 Sep. 10

Llegamos a un punto crítico. Esta semana el gobierno de Felipe Calderón se vio obligado a comprometerse, ante representantes del Comité para la Protección de Periodistas y la Sociedad Interamericana de Prensa, a desarrollar un programa, para octubre, que enfrente la ola de agresiones, crimen, impunidad y censura en contra de periodistas que se ha registrado en México en los últimos años. El efecto acumulado es ya insostenible. El compromiso se adquirió después de un encuentro en el que participó Felipe Calderón y parte de su gabinete con representantes de esos organismos internacionales y se concretó días después de que fuera presentado, en México y en Nueva York, el informe especial del CPJ "Silencio o muerte en la prensa mexicana". Los investigadores Carlos Lauría y Mike O'Connor concluyeron ahí que el crimen, la violencia y la corrupción están destruyendo al periodismo local. Ambos recorrieron México durante cuatro años. Hablaron con decenas de periodistas, quienes les narraron acerca de los peligros que hoy representa hacer su trabajo en México y sobre la "devastadora autocensura" que genera la violencia contra la prensa.

El informe ubica a México como uno de los países más letales para el periodismo y uno de los peores en materia de investigación y esclarecimiento de delitos contra periodistas. Analiza el asesinato de 22 periodistas y tres trabajadores de los medios de comunicación y la desaparición de siete periodistas en este sexenio. Sobre el asesinato de Bladimir Antuna García, reportero de la crónica del crimen, se lee: "...conocía por su trabajo a todos los policías y criminales de Durango. Cuando fue amenazado de muerte, autoridades estatales lo ignoraron. Tras ser asesinado, también lo ignoraron". Sobre Reynosa: se afirma "...el Cártel del Golfo controla al gobierno, la policía e incluso a los vendedores ambulantes. Pero eso no se lee en la prensa local: el cártel también controla a los medios de comunicación".

La crisis es real. 2010 ha sido un año particularmente trágico para la vida intelectual, periodística y cultural de México. Además de la violencia e impunidad contra periodistas, murieron, por otras razones, figuras fundamentales y sustantivas de la conciencia nacional: Carlos Monsiváis, José Saramago (cercano siempre a México), Bolívar Echeverría, Carlos Montemayor y más recientemente el también querido Germán Dehesa; se fueron de un hilo, con el transcurrir de los meses. Se echan de menos sus voces críticas en un país necesitado de explicaciones. El adelgazamiento, por diferentes vías, de la vida intelectual y crítica en nuestro país se agudiza porque -si nos faltara- éstos son días, también, de canallas en la prensa nacional.

No sólo se extiende el fenómeno de la censura y la autocensura producto del miedo y la intimidación. Se dejan ver, con impudicia, también los nexos desarrollados por un pequeño grupo de periodistas envilecidos que se erigen en comparsa y defensores de autoridades reactivas y por demás incompetentes. La infame campaña, de vendetta editorial, desatada contra Reforma por parte de Televisa; el caso de los camarógrafos y reporteros secuestrados en la Comarca Lagunera y los editoriales publicados el viernes y domingo pasados por El Diario de Juárez, donde dirigen su mensaje ya no a una autoridad formal ausente sino directamente al crimen organizado preguntándoles qué pretenden matando periodistas, han sido asuntos que han desatado un cruce de acusaciones entre medios de comunicación. Algunos colegas han enfilado baterías -en defensa de la verdad oficial e intereses particulares- en contra de posturas independientes y de los principales periódicos del país: contra Reforma, contra El Universal, contra La Jornada, contra el que respingue. Han ayudado mucho, en estos días por cierto, a identificar el quién es quién de la prensa nacional.

Hablando de: el próximo martes 28 en el Foro Cultural Chapultepec será presentado Por la izquierda, el libro de Silvia Cherem sobre el maestro Miguel Ángel Granados Chapa, quien cuenta "medio siglo de historias en el periodismo mexicano". De Khálida editores, participarán José Woldenberg, René Delgado, la autora del libro y quien esto escribe. Inmejorable momento para comentar sobre la vida y obra de un periodista de excepción.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Completa el cuento.

Estoy en el puerto esperando la llegada de la embarcación que me llevará a mi nuevo destino, el cambio de vida, ese cambio que tanto estuve añorando durante los años de servicio fiel al sistema que hoy abandono.

Por fin llega, se aproxima, ese resplandor que ciega y que ilumina los callejones a mis espaldas, en los cuales los gatos se deleitan con el manjar de pescados abandonados por las amas de casa del puerto.

Buen viaje, me desean mis pocos amigos, ningún gesto de añoranza futura, ni una lagrima, palabras vacías de suerte y deseo de que jamás me vuelvan a ver por estos parajes. Gracias, en realidad no extrañaré esta ciudad llena de salvajismos.
Subo al bote, saludo al que será mi capitán por los siguientes 3 días, llevo mis pertenencias en una maleta de tamaño considerable, el 80% de ellas son libros, y en mi mano cargo La Odisea que me acompañará cuando la conversación con el navegante no de para más, y sienta la leve tranquilidad de quedarnos en silencio.

-todo es muy diferente por aquellos rumbos

-lo se, por eso me voy

-no esté tan seguro de saber lo que sabe

-la seguridad es algo que no me acompaña muy seguido

-el cambio será drástico, pero en fin, yo qué me meto

-lo sé

Siento el viento en mi cabello, la brisa del mar golpeando (si es que se puede usar esa palabra para la caricia que es la brisa) mi rostro, el sol en mi piel y la satisfacción de abandonar mi vida, si es que en verdad tuve alguna un día…

-la vida siempre da muchas cambios, ¿no lo cree?

-los cambios siempre dan mucha vida

-encuentro poco razonable su decisión de partir a ese lugar

-encuentro muy poco razonable el quedarme, los días son interminables, pasan tan rápido que parece que nunca pasan, interminables, nunca comienzan jamás terminan.

-algo similar en la vida sobre el mar

-la diferencia es que aquí son interminables por que los disfrutas, allá lo son por que los sufres

-razones por las cuales partir amigo mío

-las únicas y las reales

lunes, 13 de septiembre de 2010

El sistema electoral en boca de la juventud

La opinión de los individuos que viven en colectividad es de suma importancia para conocer la perspectiva de una sociedad, con mayor razón las ideas expresadas por los jóvenes de una comunidad sirven para conocer un estado de la cuestión sobre una colonia, una ciudad, un estado o un país.

200 Ecos, proyecto documental difundido vía Internet, logra capturar opiniones de jóvenes en un contexto muy delimitado como lo es la Zona Metropolitana de Guadalajara, todos en este espacio tienen la libertad de expresarse, una analogía para una democracia.


La base de una democracia es la equidad en condiciones y oportunidades para todos los ciudadanos, al menos en teoría; en el México actual nos encontramos con la pregunta ¿realmente vivimos en una democracia?, o como mucho lo señalan instancias internacionales ¿de verdad estamos en una transición a la democracia?

”Yo creo que la democracia es imperfecta, México es un país imperfecto”, dice uno joven, padre de familia de 27 años de edad, tapatío, entrevistado en un viejo barrio de la gran ciudad en que se ha convertido Guadalajara.

Los avances que ha habido en México respecto al tema democrático son indudables, haber pasado por una independencia que reconocía el valor del país como tal en su soberanía nacional, hasta una dictadura como lo fue el Porfiriato, pasar por el caudillismo postrevolucionario hasta llegar al sufragio universal no ha sido poca cosa.

En 1823 solo los hombres con un grado cultural podían votar, el sistema electoral era indirecto y en tres pasos: primero en las parroquias popularmente se elegía a un elector de distrito, después éste elegía a un elector secundario que formaba un colegio electoral y este colegio ejercía la elección de los diputados. Las legislaturazas estatales y el Congreso federal elegían al presidente.

Pese a los avances en 200 años tenemos una perspectiva no muy alentadora en el México actual respecto a la participación política ciudadana, independientemente del surgimiento en los últimos 20 años de movimientos de la sociedad civil.

Se encuentra interesante el hecho de que muchas personas piensan que la democracia solo se sustenta en el voto, en el acudir a las urnas el día de una elección de representantes, gobernantes o presidentes.

En éste contexto la opinión de 6 jóvenes sobre el tema electoral dilucida mucho de la concepción que se tiene por parte de éste estrato social sobre el sistema en el que estamos inmersos.

“Cuando yo tenga 18 voy a votar y a cambiar el destino de México” es el recuerdo de Nydia Pando, tapatía de 18 años, sobre la manera en que pensaba en su niñez al ver a sus padres salir a votar, tristemente menciona la increíble decepción que se encuentra ella misma, en este momento de su vida, al ver que con un voto no se puede hacer algo; el primer esbozo de la descomposición de un sistema político•electoral.

Esa misma descomposición que se ha gestado a lo largo de la historia de nuestro país, y que tiene motivos extensos y variados, ha sido catalizador para una apatía en cuanto a la participación.

“Muchos jóvenes nomás queremos la IFE parra poder entrar al bar o al antro, que se te olvida que lo que necesitas es ir a votar”, señala con expresión un tanto exaltada, en la glorieta Los Cubos como fondo; existe esa parte de jóvenes que ansían tener 18 años para sacar su credencial y poder decir libremente “soy mayor de edad, déjame pasar”; quién sabe, es una pregunta, si sería la misma cantidad de gente con credencial del Instituto Federal Electoral si ésta fuera separada de una cédula de identidad que precise la edad de las personas, muchos jóvenes no tendrían necesidad de tramitar ni de tener su IFE.

En las pasadas elecciones de 2009 en Jalisco para elegir diputados locales 193,083 personas (9.17 por ciento de los votantes) anularon su voto, éste movimiento surgió por el descontento, creo que generalizado, hacia la clase política que ha gobernado el país en los últimos años, como acepta Andrés Guerrero, estudiante, “en las elecciones de 2006 sí voté por el PAN y no me gustó mucho”, el descontento no es un asunto tan nuevo de 10 o 15 años, va más atrás pero los jóvenes de hoy no vivimos los problemas antiguos, estamos viendo los actuales y pensamos en consecuencia a estos.


Esa cuarta fuerza electoral que representó el voto en blanco en 2009 tuvo impacto en el recuento de votos en algunos municipios en que la diferencia entre el candidato ganador de la elección y el segundo lugar fue menor que la cantidad de votos nulos emitidos, como sucedió en Zapopan.

“El voto nulo puede ser simplemente una manera de decir juntos que nos tienen en el hartazgo”, comenta Graciela Sandoval en una locación de Guadalajara viendo pasar el ferrocarril. Ese hartazgo creado porque “desafortunadamente a los políticos les interesa solo acarrear gente”.

Aquellos que anularon su voto defienden la idea de expresar mediante su derecho a la votación que ninguno de los candidatos que ofrecen los partidos políticos les parece viable para sostener un gobierno que toma decisiones que les afectan; los críticos de éste movimiento arguyen que es solo beneficiar al partido más fuerte, con el clásico “si no votas, no te quejes”, pensando en que “El voto nulo hace voltear a la gente que está inconforme, pero no vas a salir de eso, es un voto nulo” Roberto Aguirre, de 27 años.

“Te dicen lo que quieres escuchar y al final no hay nada de eso”, comenta ante la cámara Crhistian Adrián, estudiante de teatro; como esta hay muchas frases expresivas del sentir por el incumplimiento de las promesas de campaña por parte de los servidores públicos.

Muchas personas pueden creer que el problema central son los partidos políticos y su necesidad de poder por el poder, “creo que los partidos y los políticos deben regresar a su forma de (preguntarse) , que escuchen a la gente, creo que la gente sabe lo que necesita”, y si la gente sabe lo que necesita sabrá qué exigirle a los candidatos de los partidos, sin embargo estos se ciegan, viven en un limbo en el que las leyes del mercado y la publicidad les hacen creer que regalar productos y prometer soluciones momentáneas a diestra y siniestra es la mejor forma de hacer lo que hacen: convencer a la gente de que el otro es peor que ellos.

¿Pero por qué la gente entonces no exige?, en realidad sí lo hace pero “es muy fácil toparse con pared”, hay millones de jóvenes, adultos mayores, indígenas, pobres, campesinos, que exigen y lucha por sus derechos, pero el poder político gobernante cree que le conviene no escucharlos, quitar la agencia al ciudadano inconforme les ayuda a perpetuarse.

Ante el cuestionamiento de un posible arrepentimiento de acción del voto yo rescato la aportación de Roberto:“Yo creo que me he arrepentido más de no levantar la voz ante un sistema que en sí es corrupto, de eso me arrepiento”.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Tenacatita

¿Este documento...

justifica esto?


Tenacatita, una aventura hacia una playa, de Agustín del Castillo.

Televisa vs Reforma


Ataques con trasfondo...
Jenaro Villamil
Proceso


Inesperada y virulentamente, Televisa emprendió la semana pasada una campaña de desprestigio contra el Grupo Reforma, basada en una hipócrita denuncia de los anuncios clasificados que publicitan servicios sexuales y que aparecen en las páginas de sus periódicos, en particular los que circulan en la Ciudad de México, Reforma y Metro. El trasfondo de los ataques es de índole muy distinta y tiene que ver con la molestia del poder, que ha dado todo tipo de prebendas al consorcio televisivo, por la conducta del dueño, presidente y director general del grupo editorial, Alejandro Junco de la Vega, que decidió radicar en el extranjero por la inseguridad que se vive en México. En realidad, Televisa, al que Reforma atribuyó haber sido beneficiario de la “ganga” que le permitió obtener dos licitaciones clave en materia de telecomunicaciones, sólo ha sido un instrumento…

Cuando Alejandro Junco de la Vega decidió autoexiliarse en 2008 por razones relativas a su seguridad y la de su familia, el dueño y presidente del Grupo Reforma ponía la primera piedra en el hígado del máximo poder que hoy, a través del consorcio de comunicaciones consentido del momento, Televisa, ha colocado a la editorial regiomontana como blanco de una inusitada y virulenta campaña de desprestigio.

En los últimos meses, muchos habitantes de Monterrey –de los más pudientes, por supuesto– atravesaron la frontera norte en busca de un paraíso que sustituyera al que el crimen organizado les arrebató inesperada y violentamente.

Pero el primero que huyó, entre los más prominentes, fue Junco de la Vega.

“Quien se va de Monterrey es un cobarde”, escribió el 29 de agosto en su cuenta de Twitter el presidente y director de Cementos Mexicanos, Lorenzo Zambrano. El magnate regiomontano convocaba a “luchar por lo que creemos. Tenemos que retomar nuestra gran ciudad”.

En menos de dos días la cuenta de Zambrano en esa red social sumó 13 mil 315 seguidores y contribuyó a desatar una campaña en los espacios informativos de Televisa contra el empresario Alejandro Junco de la Vega, cabeza del Grupo Reforma, y contra los periódicos de esa corporación.

La campaña a la que Televisa dio voz y pantalla se inició sutilmente el 30 de agosto, el mismo día que se anunció la detención de Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, y en vísperas del cuarto informe de gobierno de Felipe Calderón Hinojosa.

A los 20 minutos de iniciado El Noticiero se aludió al mensaje de Zambrano. El conductor Joaquín López Dóriga contextualizó así:

“Y no es que sean muchos los hombres de negocios que se han ido de Monterrey, pero sí son conocidos. Es el caso del dueño de los periódicos El Norte y Reforma, Alejandro Junco, que es de los que abandonaron Monterrey para irse a refugiar a Texas, donde vive en su residencia de Austin.

“En julio de 2008, cuando se fue, Junco envió una carta al gobernador de Nuevo León, Natividad González Parás”. La imagen de fondo, mientras se reproducían párrafos de la misiva, era una foto de Junco de la Vega.

La información no era novedosa. En su misiva el empresario periodístico apuntó:

“Sé que te enteraste de que mi familia y yo nos hemos cambiado de residencia a Texas. Estaba en un dilema. Comprometer nuestra integridad editorial o cambiar a la familia a un lugar seguro. Los problemas de inseguridad a eso nos orillaron. Perdimos fe. Y eso cuenta mucho en un país donde millones la han perdido y han emigrado.”

Junco declaró a la agencia AP, en marzo de 2010, que su mudanza a Texas fue producto de las amenazas que recibió de “terroristas”, integrantes de las organizaciones de narcotraficantes, contra él y su familia.

“Alguna vez mi esposa me preguntó: ‘¿Quieres ser el periodista más importante del panteón?’”, rememoró Junco en esa entrevista.

Lo singular fue que Televisa ejemplificara las palabras de Zambrano, uno de los hombres más acaudalados del país, con el caso de Alejandro Junco.

El mismo 30 de agosto, Zambrano le aclaró a los tuiteros que su mensaje no estaba dirigido a “la gran mayoría de los regios, que son gente de bien, entrona, que día a día trabaja con honestidad, sin seguridad especial”. Su mensaje fue “a esta pequeña minoría”.

“¡Qué vergüenza que quienes más han recibido de Monterrey son los primeros en huir!”, remató en otro mensaje.

En su momento, con el objetivo de que profundizara en sus conceptos, Proceso solicitó por vías formales una entrevista con Zambrano. Amables en su trato, los voceros del dueño de Cemex dijeron que, por el momento, no estaba interesado en hablar con este semanario.

De pronto, desde el 31 de agosto la campaña de Televisa tomó otro vuelo. El equipo editorial de la empresa de la televisión privada mexicana que ha resultado más beneficiada con las dos últimas licitaciones de telecomunicaciones del gobierno de Felipe Calderón (la red de fibra óptica de la CFE y la telefonía celular para cuádruple play) inició un ataque de cinco días continuos contra los periódicos Reforma y Metro.

Un par de meses antes, paradójicamente, en la misma página editorial de Reforma, el 14 de julio, Claudio X. González, integrante del Consejo de Administración de Televisa, había lanzado una dura crítica al gobierno federal panista:

“Ha terminado la etapa de Felipe Calderón como presidente de México y ha comenzado la segunda etapa de Felipe Calderón como presidente del PAN. Qué lástima”, afirmaba en su primer párrafo el empresario, amigo personal de Emilio Azcárraga Jean.

No obstante, la relación entre Televisa y Calderón cambió una semana después, cuando la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) falló a favor de la sociedad Televisa-Nextel, que ganó el mayor bloque de la licitación 21. Por 180.3 millones de pesos esta sociedad podrá explotar hasta 2030 el bloque de 30 megahertz para dar servicios de telefonía móvil convergentes con internet.

Reforma calificó este fallo como una “ganga”. Contrastó los 180.3 millones de pesos que pagaron Televisa-Nextel con los más de 5 mil millones de pesos que pagaron en conjunto los otros competidores de la licitación de la banda de 1.7 gigahertz.

Dos exsubsecretarios de Comunicaciones, Jorge Álvarez Hoth y Purificación Carpinteyro, criticaron en sus colaboraciones de Reforma el resultado de esa licitación. El primero advirtió que se trataba de un arreglo entre Televisa y el gobierno de Felipe Calderón por la sucesión de 2012. Carpinteyro denunció el mismo 30 de agosto que Televisa, a través de su subsidiaria Cablemás, controlaba la organización que agrupa a empresas de televisión por cable PCTV y le ordenaba “ventas amarradas” de contenido, práctica monopólica condenada por la Comisión Federal de Competencia.

Las críticas de Reforma provocaron sendos desplegados de réplica. El responsable de comunicación de Televisa, Manuel Compeán, aclaró en uno de ellos que no hay tal “ganga” porque la sociedad Televisa-Nextel invertirá 18 mil 300 millones de pesos… sólo que a plazos, a lo largo de los próximos 20 años. En otro desplegado, Compeán acusó a Reforma de “censurar” una respuesta a Carpinteyro. La publicaron en otros periódicos como inserción pagada. Desmintieron que tuvieran el control de PCTV.

El búmerang



El lunes 6, el Grupo Reforma puso otro elemento para el encono del poder que representa Televisa. El subdirector editorial del periódico que se edita en la capital, Roberto Zamarripa, publicó un artículo titulado Mimetización. En uno de los párrafos se señala:

“La narcocultura ronda los estudios de TV, seduce a famosos, enreda a bellezas. Mansiones rentadas para filmar telenovelas resultaron madrigueras criminales (en San Ángel Inn, donde se grabó Cadenas de amargura, o en el Pedregal, donde se grabó Rubí). Guillermo Ocaña, preso por ser lavadólares de los Beltrán, era conductor televisivo y manager de artistas.”

Zamarripa citaba el contenido de una nota publicada el 18 de junio en Reforma. Ocaña fue detenido como presunto lavador de los Beltrán Leyva desde abril de 2010, pero el hecho no se había dado a conocer.

“Las autoridades sospechan que Ocaña es uno de los eslabones que vinculó a artistas de la farándula con miembros de la banda Beltrán Leyva, debido a que fue conductor televisivo, manager de cantantes y dueño de una empresa de promoción de eventos y espectáculos”, decía el cuerpo de la nota firmada por el staff de Reforma.

Con esos antecedentes, entre ese mismo lunes 6 y el jueves 9 los noticiarios, mesas de análisis informativo y hasta segmentos de espectáculos de Televisa emprendieron un ataque inusitado contra Metro y Reforma acusándolos de ser promotores de la trata de personas, por la publicación de anuncios clasificados sobre servicios sexuales.

El lunes 6, martes 7 y miércoles 8, El Noticiero, conducido por Joaquín López Dóriga, tuvo como reportaje principal el presunto vínculo de los anuncios publicitarios de servicios sexuales con la trata de personas.

El 8 de septiembre dedicó 16 minutos ininterrumpidos a un reportaje que llamó Violencia y sexo, bomba de tiempo. Incluyó portadas de Metro, reproducción de los anuncios clasificados, entrevistas con senadores que condenaban ese tipo de publicidad y enlaces con su corresponsal en España, a partir de la discusión abierta en ese país para regular ese mercado.

En la mesa de intercambio de comentarios, titulada Tercer grado, Carlos Loret de Mola reafirmó lo que ya había dicho en sus espacios matutinos: “Así se las gasta Reforma”, dijo, y los anuncios son una prueba “del amarillismo y el sensacionalismo más puercos” del periódico, con acento en las dos últimas palabras. Leopoldo Gómez, vicepresidente de Noticias, consideró que esto podría “fungir en la cadena como el último eslabón del crimen organizado”. Los otros comentaristas, que cada miércoles a medianoche se reúnen ante las cámaras de Televisa, coincidieron en que se trataba de un caso “muy grave” de falta de ética periodística.

Hasta el cierre de edición de este semanario, Reforma no había respondido a los ataques. Sólo el artículo titulado Televisa vs. Reforma, firmado por Carmen Aristegui, el viernes 10, hizo referencia explícita al caso. “Es de tal obviedad que se trata de una campaña que los colegas que se encargan de alimentarla la deben estar pasando muy mal. El modelo ya lo conocemos”, apuntó Aristegui.

En su noticiario radiofónico de MVS, la periodista abordó la campaña de linchamiento, al mismo tiempo que el columnista Miguel Ángel Granados Chapa, colaborador también de Reforma, hizo lo propio en su noticiario de Radio UNAM.

La acusación de Televisa cae por su propio peso. La misma televisora promueve ese tipo de anuncios en las páginas de sus revistas de mayor circulación. Por ejemplo, la última edición de TV y Novelas, del lunes 6, contiene dos páginas completas y dos cuartos de plana con anuncios donde se hacen contactos para servicios sexuales vía celular.

Los anuncios promueven juegos sexuales al estilo Kamasutra, videos, chat en vivo, ligues y servicios a domicilio. “Hay nuevos chicos en la comunidad esperando conocerte”, refiere una de las agencias publicitadas.

En ninguna de las emisiones informativas sobre el “escándalo” detonado por Televisa se mencionó el caso de TV y Novelas ni de anuncios de ese tipo que se transmiten en programas nocturnos de televisión por cable y de Sky, pertenecientes también a Televisa.

40 millones de linchamientos



No es la primera vez que hay campañas similares desde alguna de las dos grandes televisoras. Televisa y TV Azteca unieron sus fuerzas para criticar al empresario Isaac Saba, socio de Telemundo en el proyecto de la “tercera cadena” televisiva; Televisa decidió “borrar” de la pantalla a Santiago Creel, excoordinador de la bancada del PAN en el Senado; y ambas se unieron en cadenas nacionales para oponerse a la reforma electoral de 2007.

En 2005, TV Azteca y la revista Vértigo difundieron en su serie Cría cuervos una entrevista con Rodolfo Junco de la Vega Gómez, padre del director de Grupo Reforma, que acusó a sus hijos Alejandro y Rodolfo de haberlo despojado de sus acciones.

En aquella ocasión el Grupo Reforma calificó el propósito de la empresa de Ricardo Salinas Pliego como “un claro intento de restar patente moral a la labor de nuestros periodistas y coartar la libertad de expresión” de los diarios de la corporación regiomontana.

En esta ocasión ni Junco de la Vega ni el Grupo Reforma han respondido.

Por lo pronto, el gobierno de Calderón ya le otorgó a Televisa –que acapara 62% de las concesiones de televisión y cuenta con 258 estaciones repetidoras en todo el país– dos concesiones más hasta 2030 para explotar redes de telecomunicaciones para fibra óptica y telefonía móvil.

Televisa se convierte así en el único consorcio que podrá ofrecer los servicios de cuádruple play y difundir sus contenidos en cuatro distintas plataformas: medios electrónicos, televisión por cable y satelital, internet de banda ancha y telefonía móvil.

Así, quien se atreva a criticar los intereses del monopolio televisivo o del gobierno federal que lo ha favorecido podría verse envuelto en una campaña de linchamiento que llegue a 40 millones de hogares.

martes, 7 de septiembre de 2010

Nota Roja

Un reportero, por orgullo propio, odia a su corrector. Un corrector, por placer mundano, disfruta las fallas del reportero.

Omar García mostró su potencial desde que, tras regresar de una década de viaje por el sur de Chiapas, ingresó al Anulista, el único diario de corte anarquista con suficiente credibilidad en la competida plaza periodística de Guadalajara. Idealista sin llegar a ingenuo, arrojado sin llegar a imprudente, sorprendió a los editores con sus reportajes frescos, bien hilados y contrastados hasta el más mínimo detalle, tal y como aprendió en la facultad de Comunicación Pública de la Universidad de Guadalajara.

Era imposible no reconocerlo en medio de toda manifestación social, con su enorme cámara al hombro, su vieja gorra del CUCSH y sus 100 kilos de peso corriendo de un lado para otro. Sus ojos oscuros, bien enmarcados por ojeras indelebles, detectaban fácilmente detalles que los demás solían pasar por alto.

Una tarde de sábado, mientras bebía café azucarado y finalizaba su crónica sobre la última represión gubernamental, fue sorprendido por la gran sonrisa que pocas veces ofrecía Marinela Hernández, la directora general.

- Joven García, tengo el gusto de presentarle a José Toral, el nuevo corrector de su sección -dijo la mujer con su clásico tono formal.

- Omar García, un placer - murmuró distraídamente mientras alargaba su mano para saludar al nuevo compañero.

Enfundado en un traje negro, de complexión delgada, estatura media, con una prominente calva que contrastaba con el bigote grueso y rojo plantado en medio de su rostro, el corrector se apresuró a contestar:

- Igualmente. Más lleva acento.

Antes de que García pudiera reaccionar, José Toral continuó, apuntado a la hoja que se encontraba sobre el escritorio:

- Cuando se usa como adverbio comparativo que denota superioridad, "más" lleva tilde, a diferencia de la conjunción átona de sentido adversativo "mas".

- Como podrá ver -intervino Marinela dirigiéndose al periodista- el señor Toral está listo para comenzar a trabajar.

- Ya lo noté. Señor José Toral, agradezco su atención pero sé perfectamente cómo se utilizan los acentos. Ahora, si me permiten, debo terminar esta crónica.

La directora y el corrector se retiraron y prosiguieron con las presentaciones formales.

Cuando Omar García puso punto final a su trabajo, lo imprimió para llevarlo personalmente a Toral. Normalmente debería enviarlo por correo electrónico, pero quería ver la reacción del corrector cuando no tuviera nada qué corregir, pues había sido cuidadoso con los acentos. La oficina del nuevo estaba vacía, pero tomó asiento para esperar. Sobre el escritorio, junto a una escultura de lo que parecía ser una tortuga, se encontraban unas enormes tijeras de níquel plateado de cuarenta y cinco centímetros de longitud.

- Llevo diez años trabajando con ellas - exclamó Toral al entrar en la habitación y sorprender a García con la mirada perdida en el instrumento-. Me gusta trabajar con el viejo método. Esto es para mí, ¿no es así? El texto que escribía cuando nos presentaron.

- Así es, pero no se tome la molestia, ya hice el trabajo por usted.

- Entonces así será.

Apenas salió García, Toral comenzó a leer el texto. Las tijeras produjeron un agudo y raspante sonido al tiempo que cortaban de un sólo golpe todo un párrafo. Tomó un lápiz y corrigió varias frases redundantes, tachó los calificativos sensibleros y garabateó un nuevo y sarcástico titular.

El rostro de Omar García palideció al leer en el periódico recién impreso, aún con la tinta húmeda, su desgarrada prosa. Salió disparado a donde Toral, quien sonreía justamente al ver el resultado de su trabajo.

- ¡Desgraciado carnicero! -gritó García.
- ¡Poetizo de medio pelo! -contestó José Toral, alzando las tijeras amenazadoramente.
- ¿Poetizo? ¡Vete al infierno maldito periodista frustrado!

Si el editor de noticias y el jefe de información no los hubieran detenido, aquello hubiera terminado en algo más que gritos.

La directora Marinela creyó que podría sacar buen partido del enfrentamiento. Comenzó a picarle la cresta a Omar García para que realizara su trabajo cada vez mejor y a José Toral lo incitó a ser aún más escrupuloso. García pasaba horas refinando las metáforas, repasando frases en voz alta para evitar cacofonías, revisando la coherencia de todo el texto. Toral acudía a inmensos diccionarios y consultas en bases de datos especializadas en lingüística, a fin de localizar toda inconsistencia de sintaxis.

Tras varias semanas de tensas relaciones, gritos y un archivo de varios meses de trabajo misteriosamente desaparecido del cubículo de Omar García, el reportero pidió un par de días de vacaciones.

Al día siguiente, mientras Toral tomaba tranquilamente su desayuno en el comedor principal, rodeado por una veintena de compañeros de trabajo, se hizo presente García.

- ¡A ver si puedes cortar esto!- exclamó provocadoramente al tiempo que ponía sobre la mesa un manuscrito pequeño y las tijeras del corrector.

José Toral aceptó el reto con ojos centelleantes y una gran sonrisa; comenzó a tijeretear en el aire mientras desdoblaba el papel, dispuesto a eliminar hasta el error más mínimo.

Pero cuando Toral leyó lo que había escrito, perdió su sonrisa y volteó rápidamente hacia García, quien sacó un revólver y le disparó a bocajarro en el abdomen. Animado por un deseo de venganza, Toral empuñó las tijeras y las clavó de una sola estocada en el centro del pecho del reportero, cayendo los dos contrincantes muertos, en medio de la sala.

Arrugado en la mano de Toral, estaba el papel que decía lacónicamente:

"José Toral, 33 años, corrector del Anulista, fue muerto a tiros a las 10.30 de la mañana en el comedor del periódico por el reportero Omar García, de 31 años, quien, a su vez, fue muerto por el corrector por arma blanca."

La breve historia, que sólo necesitó un titular, redactado por la directora del diario, se publicó en la sección policíaca sin cambiar una sola palabra.